Relaciones políticas
Venezuela reconoció oficialmente la independencia de la República de Belarús el 11 de enero de 1992. Las relaciones diplomáticas entre ambos países se establecieron el 4 de febrero de 1997. En diciembre de 2006 se inauguró la Embajada de Venezuela en Belarús, y en octubre de 2007 abrió sus puertas la Embajada de Belarús en Venezuela. Desde ese momento, la cooperación bilateral alcanzó el nivel de cooperación estratégica, convirtiéndose en el período más fructífero en la historia de las relaciones belaruso-venezolanas: el diálogo interestatal se desarrolla activamente al más alto nivel y se intercambian visitas de delegaciones oficiales.
A pesar de la distancia geográfica las relaciones belaruso-venezolanas continúan siendo amistosas, basadas en la similitud de puntos de vista sobre el orden mundial, actitudes ideológicas, evaluación común de la situación en muchos temas de la agenda internacional.
Minsk es considerado por Caracas como uno de los principales aliados. Se destaca el papel especial de Belarús como socio estratégico de Venezuela (junto con China, Rusia, Turquía e Irán) en el programa estatal venezolano Plan de la Patria 2025.
Se dio un impulso adicional significativo para una mayor intensificación de las relaciones como resultado del nombramiento de los jefes de ambos estados y el intercambio de visitas de sus enviados especiales: 6-10 de octubre de 2021 – visita a Belarús del Enviado Especial del Presidente de Venezuela Adán Chávez; 15 al 17 de diciembre de 2021 – visita a Caracas del Representante Especial del Presidente de la República de Belarús para Venezuela Viktor Sheiman, durante la cual se realizó la VIII reunión de la comisión conjunta de alto nivel Belarús-Venezuela, durante la cual se llegó a una serie de acuerdos clave.
La interacción en el marco de las organizaciones internacionales se está desarrollando de manera constructiva. La cooperación entre Belarús y Venezuela en plataformas internacionales se lleva a cabo en el marco de la ONU y el Movimiento de Países No Alineados. Las posiciones de ambos países coinciden en las principales direcciones de la política mundial, incluso sobre la formación de un mundo multipolar y la no injerencia en los asuntos internos.
